jueves, 13 de enero de 2011

¿O es que acaso hay alguien más aquí?

Anoche tuve uno de esos sueños horribles. De esos sueños que recuerdas con claridad con todas las incoherencias propias de las pesadillas. Me costó asimilarlo y comencé a evocar los detalles tan claros hasta que manejaba hacia el trabajo.
Mi sueño era una angustia. Regresaba a aquel hospital donde en algún momento de mi vida me lanzaron una bomba atómica por dentro. Era la misma cama, el mismo sol en la ventana, la misma gente. Fué como una regresión.
La gran diferencia era que no podía hablar..escuchaba las conversaciones, quería opinar.. y absurdamente nadie podía escucharme.
Del hospital pasé a otros lugares y a otros momentos.. pero el más claro fué ese.
No sé qué diablos nos pasará en la psique que durante el sueño revive y abre la caja de pandora de nuestros peores miedos.. Poderosos temores que no palpamos hasta que los soñamos como gigantes dormidos que se despiertan solo mientras duermes.




De un tiempo acá el mundo ya no tiene ganas de hablar conmigo.

lunes, 10 de enero de 2011

jueves, 6 de enero de 2011

Rayuela. Un libro que es muchos libros.

En 1963, una novela de Julio Cortázar se convierte en una de las más grandes obras publicadas por un autor hispanoamericano. Es un libro relativamente difícil, que plasma una serie de técnicas renovadoras y llenas de vanguardia. A muchos de nosotros Cortázar nos hizo leer lo que sentíamos, como eso de no morirse nunca y andar muriéndose una mañana. El vértigo cotidiano, la añoranza. Quien no ha leído Rayuela y es un lector desprevenido ajeno a la excentricidad, se encontrará con un extraño (y muy criticado) tablero de direcciones. Ésto es ante todo, lo más atractivo de ésta novela para mi gusto. Hay que tomarse la audacia del autor como lo que es: un rasgo de humor, una broma gigantesca. Entregarse al "Rayuel-o-matic", a las alusiones constantes, a una técnica narrativa un tanto enigmática pero fascinante, pero sin perder el sentido profundo del relato: la búsqueda incansablemente constante..el humor y la nostalgia de la vida. 
Siempre he pensado que los libros nos suceden en diferentes etapas de nuestra vida, nunca nos parecerá igual un libro después de leerlo varias veces. Un libro que vuelve a leerse nunca se lee de igual forma de una etapa a otra. Y un libro como Rayuela merece ser leído más de una vez. Regalarse el gusto tan propio de sentir que, en algún momento, iniciamos un camino equivocado. Descubrir como Oliveira en una noche de borrachera, que hemos perdido la pureza.
En una novela que tiene como característica principal la franqueza en la expresión de lo erótico, conviene comprender muy bien lo que significa ésta palabra.Llenarnos de erotismo.  Llegar al momento clave en el que el autor nos sugiere buscar un cielo "allá lejos pero en el mismo plano". Jugar con las palabras, deshacerlas y horrorizarnos con ellas como ejercicio de lo absurdo. Dado que éste Cortázar nos sugiera en cada página que la vida no es más que eso.
Dejarse envolver en el surrealismo de las palabras. 






Escribírle a un amor que no existe para limpiar tu ausencia de mi pluma. 
Ya no hay tinta contaminada por tus miedos.


martes, 4 de enero de 2011

Feliz todo.


Regreso de un viaje fantástico. De esos que se planearon solamente en meses y estuvieron llenos de impulsos y de sorpresas. Aventura pura. Regreso de un viaje que me sacó de un letargo anímico que siempre se apodera de mí a final del año, cuando ni siquiera me atrevo a escribir propósitos por que ya de por sí el futuro se ve muy breve cuando se mira de frente como para andarle organizando los pedazos de vida a nuestro antojo.
Regreso más sabia, más audaz y más loca que antes. Descubrí que la impulsividad sigue siendo mi materia favorita en un solitario aeropuerto un primero de enero a las 2am después de escuchar en vivo a uno de mis grupos favoritos por un plan que en principio resultó la mejor locura que haya hecho sin saberlo hasta después. Jamás arrepentida. He de confesar que sigo ronca hasta hoy. Entre gritando, desvelos y mucho frío. Después de recibir el año nuevo tan lejos de casa y alejarse unos días, se aprecian un poco más las cosas sencillas que tenemos siempre a la mano y claro que a los amigos. Ahora me quedan unos pocos días antes de volver a la rutina y un poco más (mi maestría siempre iniciará a mediados de enero, al parecer) así que a descansar y a disfrutar antes de todo. Mis despropósitos de año nuevo son los mismos que los del año pasado: nada y ninguno. Feliz todo a quienes se toman la molestia de leer. :)

Corta los lazos que te atan al pasado, deja de proyectarte en el futuro, acepta con ternura lo que eres en este instante.

Mis viejas

Me propuse hacerme una lista de algunas mujeres, unas famosas y otras no tanto que me hacen sentirme orgullosa de mi género. Y aquí están. ...