jueves, 15 de marzo de 2012

Leer es un domingo eterno..


Hace mucho que Mérida merecía una feria de lectura. La merecía desde hace mucho; pero hasta este mes de marzo del anunciado año del fin del mundo, nos pudimos llenar de letras como nos lo merecíamos.  Libros y editoriales, todas las del país en un mismo lugar. Un paraíso para quienes disfrutamos de ese extra de realidad que no se nos acaba de manera cotidiana cuando tenemos la fortuna de perdernos con un buen libro.
Cuando este texto llegue a posarse a sus ojos, la feria habrá terminado, pero mientras escribo continúa, muy a pesar de que los primeros tres días hayan sido intensos he de confesar que la ausencia de José Agustín (por cuestiones de salud) me bajó un poco el ánimo. Aunque aún después pueda regresar el último día con la promesa de saturar las repisas de mi librero con letras a mitad de precio y ser muy feliz.
La primera noche de esta fiesta de las letras estuvo llena de girl power. Con nada menos que la señora Elena Poniatowska, Margo Glantz, Mónica Lavín, Sara Poot y Cristina Rivera Garza en una rica charla sobre los procesos de escritura. Este grupo de mujeres, provocadoras con el oficio de las letras como bandera; lanzaron una interesante pregunta al aire:¿Crees que eliges las letras cuando escribes?
    Qué ingenuos somos cuando pensamos que elegimos las palabras cuando son las que nos eligen a nosotros. Certeras, precisas, esperando siempre tras los rincones de nuestro interior ese momento justo en el que podamos lanzarlas al aire. Toca el resto del trabajo de ponerlas en orden a nuestro ánimo, aunque en mi caso muy personal, he de admitir que nunca he tenido clara la intención con la que las acomodo. "La escritura es una aventura de la soledad", afirmó Elena Poniatowska con un aire solemne pero a la vez dulce; como  de quién nos invita a compartir un silencio a través de unas cuantas palabras escogidas sin saber por qué. “Escribir con ausencia de palabras, como si nunca se hubieran conocido” añoranza imposible cuando las palabras se conocen y están ahí, esperando a que las dejemos salir a jugar.  El proceso de escritura puede ser uno de los más divertidos juegos que pueda existir, al menos para mí. La primera noche de la FILEY estuvo llena de aroma de mujeres dulces, de mujeres entrañables que alimentan el espíritu con frases nobles y de ideas revolucionarias.  Todo ésto a través de los argumentos de Denise Dresser en la presentación de su libro “El país de uno” , un país (el nuestro) que en la actualidad pareciera seguir siendo ese que describimos como un “país de mediocres”, como si diciendo esto se dibujara una línea imaginaria entre nosotros y esos “mediocres mexicanos” que no somos nosotros. Denise Dresser nos planteó un México lleno de metáforas y añoranzas. Un país como el lago de Chapultepec, donde el hombre más rico del mundo  es una enorme ballena que difícilmente puede ser controlada por un gobierno del tamaño de una simple y pequeña chalupa.
Denise Dresser con cada palabra, nos hizo enfrentarnos a una dolorosa realidad, pero a su vez, nos invitó a ver más allá de esa realidad cuyo control sentimos que se nos escapa de las manos. Una con más razones para abrir los ojos que para cerrarlos.
Nos compartió su lista de promesas que alcanzar cada mañana cuando hacen faltan los ánimos para darle cuerda al mundo, a nuestro país, a nuestro “México lindo y qué herido”. Una lista llena de la belleza de lo cotidiano que muchas veces hemos olvidado y a su vez un fuerte diagnóstico del por qué somos como somos y tenemos lo que hemos querido tener. Una invitación abierta a dejar de contemplar y padecer en vez de buscar cambiar la realidad de nuestro país. Un discurso sobre la apatía. Un símil con Frodo, el personaje de El Señor de los Anillos, con la gesta heróica del bien y el mal cuando los héroes pueden ser las personas más comunes y corrientes. Todos podemos ser Frodo.
La FILEY  nos llegó de pronto como un recordatorio del pasado político visto a través de los ojos del Señor Eduardo del Río (RIUS). Monero entrañable, ateo, vegetariano y eterno cuestionador de todos los motivos del mundo. Defensor de la realidad, de la verdad y de la risa. Un anecdotario histórico viviente, de una trayectoria de ir contra corriente en la presentación de su libro “Santo PRI, líbranos del PAN” en un tono relajado, irreverente y sobretodo libre; nos recordó un pasado incómodo del PRI ante una realidad trágica  del  PAN y cómo  enfrentarnos a ella con un poco de humor, cuestionándolo todo y siendo escépticos extremos  muy necesariamente.
Imposible no pensar que el fin del mundo está “cerca” y  de que la FILEY nos regalara la fortuna de que José Trinidad Camacho (Trino) llegara hasta nuestra blanca Mérida con sus “Historias del fin del mundo y otras patrañas” para contar en un tono desenfadado y muy divertido qué no esperar del fin del mundo (como el fin del mundo en sí mismo, por ejemplo) así como las peripecias por las que atraviesa junto con José Ignacio Solórzano (Jis) en la producción de la próxima película más esperada del año en todas las salas del cine del país: “El Santos Vs la Tetona Mendoza”.
En este tono de fiesta, en un ánimo sumamente introspectivo, el escritor de uno de mis libros preferidos Xavier Velasco, autor de “Diablo guardián”, presentó su nueva novela “La edad de la punzada” como más que la historia de su vida, la historia de un momento de su vida, tal vez la historia de una de sus noches más maravillosas que quisiera repetir tantas veces como pudiera soportar, tal vez la historia de algo que quisiera negar. La certeza sin duda, es que sea una historia que merezca ser contada a través  de las excepcionales letras de Xavier Velasco.
La FILEY con la reunión de dos generaciones de moneros juntas, RIUS, Trino y Jis imaginándose que de llegar a la presidencia podrían hacer finalmente funcionar las cosas muy a su manera. Una plática entre cuates en la que cada uno, con sus historias , nos dejó conocer esa parte cotidiana que solo se comparte con los amigos entre unas copas de vino y buena música.
  Más allá de todas estas charlas, podría hablar de la FILEY y describirla como: Un salón repleto, como deleite para todos aquellos que vivimos en la espera del perfume con olor a libro. Y ahora que termina añorarla en una repetición infinita.
   Quisiera haber podido multiplicarme, me paro a pensar en las frases fantásticas que se me pudieron haber escapado en todas esas charlas, talleres y demás actividades que me pude haber perdido solo porque la ciencia aún no nos regala el súper poder de ser omnipresente.
   El penúltimo día de la FILEY fue mi cumpleaños, es mi costumbre regalarme lo que más me hace feliz, así que me escapé de la celebración un momento para perderme por última vez en ese espacio tan emocionante para mí. En el camino  mientras manejaba hasta el Centro de Convenciones, Radio Universidad transmitía la charla de Jorge Bucay en vivo.  Con su dulce acento argentino, invitaba a los asistentes a sentarse entre las sillas del frente donde aún había lugar. Pude imaginar el salón Progreso repleto de gente con los ojos vivos, llenos de letras y con ese brillo particular que tiene la gente que ama los cuentos; me llené de gusto al tardar más de diez minutos en encontrar estacionamiento, en ver a las familias enteras tomadas de la mano camino hacia la venta nocturna, toparme con hombres increíblemente apuestos con bolsas llenas de libros,  ver a grupos de amigos y mujeres adoradoras de las letras abrazando otros tantos, ver a tanta gente acercándose a las letras.  Todos  hacia un mismo sitio: Los libros.  Unos tal vez acercándose con curiosidad inaudita por primera vez, otros que quizás recordaron lo mágicos que son, otros tantos que se sumergen solo de vez en cuando y a otros muchos para quienes seguramente leer significa lo mismo que significa para mí: un domingo eterno. Reconocí a varios. Tenían ese brillo especial en los ojos, como de quien sigue vivo solo por esperar que un día a alguien se le ocurra inventar un perfume con olor a libros.

lunes, 5 de marzo de 2012

Perfecto

En el camino imaginario de su casa a la mía, sintonicé el radio con música selecta. Bastaron unas cuantas notas para que precisara que ésa era la canción Tal- cantada por Tal- y del disco Tal. Por lo que supe que él era un perfecto connaiseur musital..Y entonces me dieron ganas de guardarlo en formato mp3 para ponerlo en repeat todo el día..



Hoy vuelvo a sentir; sin arrugas en el corazón.

viernes, 2 de marzo de 2012

Que me espere el mundo.

Ahora que recuerdo tanto de tan poco,voy a tomarme este tiempo como esas mañanas de domingo en las que me subo al mundo muy despacio. Voy a quedarme pensando en ese breve momento en el que me enamoré de los gestos de un extraño, me voy a dejar querer por mis sábanas, voy a imaginar que no existen los lunes,voy a aplazar todo, voy a finalmente dejarte ir.. Me negaré a la invitación a despertarme de este momento taciturno, voy a disfrutar la ausencia de todo.. voy a verdaderamente mudarme de este mundo, aunque nadie me lo crea. Voy a dejar de esperar al mundo entero, por una vez será bello que el mundo espere por mí.. dejarse extrañar. Solo respirar.

 Si me descubres pensando en ti no te emociones; lo más seguro es que esté buscando motivos para dejar de hacerlo. @hypervoila

Mis viejas

Me propuse hacerme una lista de algunas mujeres, unas famosas y otras no tanto que me hacen sentirme orgullosa de mi género. Y aquí están. ...